La llegada de las Navidades no ha traído buenas noticias al centro de recogida de animales de Mougá. Según los datos aportados por Santiago Díaz Vidal, veterinario y responsable del refugio municipal -que gestiona la empresa Tragsatec- , en lo que va de mes han llegado al centro un total de 50 mascotas, el doble de las registradas en noviembre, cuando se contabilizaron 21 ingresos.
Teniendo en cuenta el ritmo actual de abandono, los responsables del centro prevén cerrar la estadística de diciembre con 62 casos de animales recogidos, una cifra similar a la registrada en julio y la más alta de todo el año. «Es normal que en época de fiestas y vacaciones haya más casos de abandono, pero lo habitual, hasta ahora, es que esta subida se diese en los meses de verano y no en estas fechas. Por eso pensamos que lo que está ocurriendo ahora se debe, sobre todo, a la crisis», apunta Díaz Vidal.
Afortunadamente, este incremento inusual de casos de abandono -que ha sido constante desde el pasado mes de julio- ha venido acompañado de un ligero repunte en el número de adopciones, con una media de 25 mensuales desde el pasado septiembre. De hecho, según un reciente estudio realizado por la Fundación Affinity, el porcentaje de animales que encuentran dueño en Mougá supera con creces al registrado en otros centros de la península: en concreto, se sitúa en un 64%, frente al 40% de la media nacional.
Denuncias y multas
Aún así, Vidal considera que no se puede bajar la guardia y por eso hace un llamamiento para que la gente se anime a adoptar, siempre y cuando se haga de una forma seria y responsable y no como fruto de las compras compulsivas y los caprichos de Navidad. Además, lanza una advertencia para los desaprensivos: «Desde el centro ya estamos poniendo denuncias por abandono y algunos de los expedientes ya se han resuelto con multas». En función de que sean leves, graves o muy graves, las sanciones por maltrato, abandono y otras faltas pueden oscilar entre 35 y más de 3.000 euros.
Desde su apertura, en agosto del 2010, el centro de Mougá ha recogido 645 animales -en su mayor parte perros, seguidos de gatos y caballos-, de los cuales casi el 80% fueron abandonados, mientras que en torno a un 20% fueron extraviados por sus dueños.
Hasta que son adoptados o recuperados por sus propietarios, los animales suelen permanecer unos 30 días en el centro. Aunque siempre hay excepciones: Melón, un perro de raza stanfford, ha vivido en el refugio desde su apertura. Pero ayer cambió su suerte. Tras 500 días en Mougá, ha sido adoptado y ya tiene hogar.
El abandono de mascotas bate su récord en diciembre
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario